domingo, 14 de abril de 2013

La búsqueda humana.

Desde pequeñ@s, las personas sienten que les falta algo, que necesitan algo aunque no saben que es.

Es como si en lo más profundo de sí mismos no estuviesen completos del todo, por ello se saben vulnerables y crean escudos, armaduras con el fin de protegerse, sacrifican la posibilidad de que los demás consigan ver como son realmente.

Esas armaduras pueden ser maneras de actuar, dar una apariencia de superioridad o la reclusión en uno mismo evitando la interacción social, pero todas ellas proceden del mismo lugar, ese vacío interno.

Y aunque es cierto que esa búsqueda nos ha llevado a ir cada vez más lejos, conquistando hasta la Luna y puede que en las próximas décadas Marte. A la mayoría sólo les ha permitido encontrarse realmente completos por unos instantes y de nuevo, han sentido esa insaciable sensación de búsqueda.

Hace mucho tiempo, más de una década quizás, leí en un cuento que esto se debe a que las almas son creadas de 2 en 2, conviven de 2 en 2, pero cuando llegan a La Tierra no les está permitido que ocupen un único cuerpo y por ello, comienzan a echarse en falta y buscan de forma instintiva cualquier medio que pueda acercarles a un alma afín, de ahí que la búsqueda humana es el resultado de esa necesidad del alma que reside en lo más profundo de nosotros.

¿Por qué os digo esto? Hace dos meses hice un viaje y después de eso mucha gente comenzó a decirme lo mucho que había cambiado en poco tiempo, fue casi un de la noche a la mañana. Ni yo mismo sabía explicarlo demasiado bien, pero la razón es que esa necesidad, esa búsqueda había desaparecido y al sentirme completo podía usar toda mi atención en realizar todo aquello que alguna vez quise hacer.


Es verdad, que durante ese viaje por un instante, en lo más profundo, tuve la certeza de que 2 almas se habían encontrado y las armaduras desaparecieron casi completamente, ya no me siento herido cuando alguien me dice algo que antes me hubiera dolido, y la razón es que de alguna forma nos hicimos más fuertes y aguantamos mejor los envites.

Ayer, mientras probaba una de las nuevas técnicas de creación, bajé a lo más profundo de mí mismo con el fin de juntar toda la energía que pudiese antes de ponerme a crear y me llevé una sorpresa pues allí estaba yo pero también estaba ella, aunque no nos hayamos visto desde entonces, esa es sin duda la causa última de este cambio.

Hay personas que me retan ahora a conseguir una u otra cosa e iré haciendo cosas, pero antes vamos a hacer una gran prueba, ya os contaré.

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